Ventiladores mexicanos de calidad internacional
Raúl Caraveo Toledo
@raulcaraveo
El día de hoy Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) presentó dos ventiladores fabricados en México con patente nacional, uno al 100 por ciento mexicano Ehécatl 4T (significa en náhuatl Dios del viento) y Gätsi (significa suspiro en lengua otomí).
Ehécatl 4T tuvo un costo de producción de 230 mil pesos por unidad y por el total de los primeros 500 de este modelo fueron 115 millones. En el Gätsi hubo participación conjunta entre el Estado y la iniciativa privada.
El proyecto fue lidereado por Conacyt, su Centro de Ingeniería y Desarrollo Industrial (Cidesi), participaron la Secretaría de Salud con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, los institutos nacionales para Enfermedades Respiratorias y de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, así como los centros nacionales de Excelencia Tecnológica en Salud y de Programas Preventivos y Control de Enfermedades. También, las secretarías de Economía, de Relaciones Exteriores y de la Defensa Nacional.
Además del Cidesi, apoyaron el Centro de Investigación en Materiales Avanzados, el Centro de Investigación en Óptica y la Corporación Mexicana de Investigación en Materiales. Asimismo, la Universidad de Guadalajara.
El costo promedio de ventiladores similares en el exterior oscila entre 24 mil y 37 mil dólares, es decir de 544,540 a 838,230 pesos mexicanos.
El llamado a esta labor titánica la convocó el presidente Andrés Manuel López Obrador hace seis meses, un proyecto que normalmente cristaliza de tres a cinco años se logró en seis meses, sólo se pudo con mucho trabajo 20 horas diarias, siete días a la semana, sólo pudo ser convocado y exigidos los resultados por un presidente que se levanta diariamente poco antes de las 5 de la mañana para encabezar las reuniones de seguridad de 6 a 7 y de 7 a 9:30 la conferencia matutina. El ejemplo y la exigencia van de la mano con la corresponsabilidad, el ritmo de trabajo se impone desde la primera dirección, eso significa el liderazgo.
Este trabajo refleja igual la colaboración, el trabajo en equipo, el diseño y fabricación de Ehécatl y Gätsi fue entre el gobierno federal, la academia e iniciativa privada sin fines de lucro, utilizando tecnología mexicana con extraordinaria calidad y bioseguridad, ingeniería avanzada accesible para todos. Hoy fueron presentados a la sociedad y se fabrican ya mil, con 500 de cada modelo, la producción paulatinamente hará más independiente y competitivo el sector salud en México, sustancialmente habrá un ahorro y a futuro se podrá exportar a otros países con lo que reforzara la independencia económica.
Lamento mencionar –pero es de justicia elemental– esto no se hubiera podido lograr en anteriores regímenes, cuando los negocios eran particulares y el gobierno solo era un instrumento para enriquecer personas.
La doctora María Elena Álvarez-Buylla Roces, directora del Conacyt, expuso que la relación entre gasto y eficiencia de los índices de innovación 2013-2018 reflejó que mientras el gasto ganó siete lugares (del 63 al 56) la eficiencia perdió 16 lugares (del 56 al 72) resultado de la depredación del sexenio anterior.
Lo anterior es reflejo de la rápida respuesta a las necesidades que surgieron de la epidemia covid-19, es muy buena noticia que debemos resaltar, destacar “la soberanía científica y la independencia tecnológica es la forma de responder de éste gobierno de México de la Cuarta Transformación a los retos, en particular estamos viendo el nacimiento de una empresa nacional, de una industria nacional para salvar vidas”.
Sin embargo, en los mundos paralelos en que vivimos la preocupación de algunos medios y articulistas es denostar y tergiversar la realidad, hoy su preocupación se centra en descalificar a las iniciativas del gobierno federal y especialmente a su vocero Hugo López-Gatell. NI hablar es su particular agenda.
La realidad es fría y cierta, verdadera, constatable, evidente. Y hoy toca celebrar los logros, felicitar a un gran equipo.
